ELK RIVER, MN
Una menor de 8 años fue encontrada muerta en la bañera de un departamento al norte de las ciudades gemelas en El River. La Oficina del Médico Forense del Medio Oeste dijo que la causa de la muerte fueron lesiones por asfixia y un traumatismo contundente, y dictaminó que la muerte fue un homicidio. Hoy los padres enfrentan cargos por la muerte de la menor.
Se presentaron cargos en el condado de Sherburne contra Brett y Sarah Hallow. Ambos han sido acusados de un cargo de asesinato en segundo grado sin intención mientras cometían un delito grave y un cargo de homicidio involuntario en primer grado.
Cada uno enfrenta una sentencia máxima de 55 años de prisión y / o una multa de $ 30,000.
La policía de Elk River fue llamada alrededor de las 3:45 pm a un complejo de apartamentos llamado “The Depot Station” en Elk River, donde encontraron a la menor Autumn Hallow, inconsciente en una de las unidades.
El informe inicial indicó que la niña fue encontrada parcialmente sumergida en la bañera.
Según la denuncia penal, cuando los agentes llegaron al lugar, Brett Jason Hallow, de 30 años, los condujo a la habitación trasera del apartamento. Los oficiales observaron a Sarah Kay Hallow, de 28 años, intentando compresiones en el pecho a la niña.
Los oficiales informaron que la niña era extremadamente frágil y delgada. Notaron que su piel estaba seca y su cabello húmedo, su cuerpo estaba rígido y sus dedos azules.
Las autoridades tomaron medidas para salvarle la vida, pero no tuvieron éxito y fue declarada muerta en el lugar.
Basándose en el estado del cuerpo de la niña, las fuerzas del orden creyeron que había estado muerta durante algún tiempo. Observaron laceraciones y marcas en su frente. También parecía tener una caída parcial del cabello y hematomas.
La policía identificó a Brett como el padre de la víctima y a Sarah como su madrastra. Autumn vivía con ellos en un apartamento con otros tres niños de 3, 6 y 10 años.
Los técnicos del BCA utilizaron Luminol para determinar que había sangre en varios puntos del baño, con la mayor cantidad de sangre en el área de la ducha.
Sarah le dijo a la policía que Autumn se iba a dar una ducha en la bañera. Dijo que la revisó aproximadamente 40 minutos después y la vio boca abajo en pulgadas de agua. Sarah dijo que tomó a Autumn, la colocó en el piso del baño y le gritó a Brett. Brett la trasladó al piso del dormitorio y llamó al 911.
La policía observó que Sarah tenía un rasguño en el costado de la nariz hacia el lado izquierdo de la mejilla.
Las autoridades hablaron con la madre de la víctima, Kelsey Kruse. Dijo que no había visto a Autumn desde finales de enero de 2020 y que no sabía de ninguna afección médica existente. Dijo que los Hallows no le habían permitido tener tiempo de crianza con Autumn en los últimos meses, citando preocupaciones sobre COVID-19 y otras razones.
El 14 de agosto, los investigadores y los trabajadores de protección infantil entrevistaron al hijo de 6 años de Brett y a la hija de Sarah de 10 años. El niño dijo que observó que Sarah y Brett a menudo usaban un cinturón marrón con extremos de encaje para atar a Autumn y ponerla en un saco de dormir rojo. El niño dijo que Brett y Sarah cerrarían la bolsa dejando solo su cabeza expuesta. También describió una camisa gris larga que también se usaría para atarla.
Dijo que dormía atada cuando estaba mal, cuando orinaba en el suelo o en su ropa o intentaba conseguir comida. La describió durmiendo en el saco de dormir durante la noche en la sala de estar, la cocina y en una ocasión en la bañera.
La hija tuvo comentarios similares sobre los Hallows usando el saco de dormir como castigo. Ambos niños dijeron que Brett y Sarah estaban en el baño con Autumn ese día.
El niño dijo que escuchó a Autumn gritar en el baño esa mañana y escuchó un fuerte “bang”.
En una entrevista el 14 de agosto, Sarah negó cualquier discusión o grito entre ella y Autumn ese día. Ella negó conocer la fuente de las heridas de Autumn y continuó diciendo que la encontró en la bañera.
Sarah negó que se hubiera realizado alguna limpieza en el baño. Admitió que Autumn había estado perdiendo peso al igual que su cabello y estimó que su peso era de 45 libras. Ella reconoció que no la llevaron a un médico.
Brett declaró en una entrevista que su memoria no era buena con respecto a los eventos de ese día. Tanto Brett como Sarah negaron haber usado el saco de dormir como disciplina.
