MINNETONKA, MN
Uno de los deportes más practicados en todo Minnesota es, por obvias razones: la pesca. Cada año, miles de minnesotanos esperan con ansias la inauguración de la temporada de pesca.
Uno de los lugares favoritos para practicarla es el Lago Minnetonka, pero Halsted Bay al extremo suroeste del lago se encuentra en peligro ya que está siendo devastado por la carpa.
De acuerdo a una investigación realizada por el Centro de Investigación de Especies Invasores Acuáticas de la Universidad de Minnesota, se estima que hay 60 mil carpas comunes infestando sus aguas.
Las carpas están removiendo el barro, arrancado la vegetación y creando condiciones que promueven el crecimiento de las algas. A medida que el agua se vuelve más turbia, también lo hacen los peces que se van a pescar.
“Usualmente lo que se ve son aguas turbias, dominadas por algas, realmente verdes. Está vacío de vegetación. Pero hoy tenemos cuatro redes establecidas,” dijo el biólogo del Distrito de Minnehaha Eric Fieldseth.
Para ganarle el crecimiento a la población de carpa y reducir sus números, las autoridades planean atacar directamente la fuente, concentrándose en los 14 lagos cercanos que desembocan en Minnetonka. “Cuando hay tantas carpas en un lago causa este daño,” dijo Fieldseth.
Los equipos que fueron contratados para hacer la limpieza han establecidos estaciones de redes con cebo en cuatro partes del lago Steiger. Para atraer a las carpas usan maíz, cientos de carpas aparecen atrapadas en las redes y es entonces cuando comienzan a removerlas.
Una a una, las carpas son arrojadas a bordo de un bote y llevadas a la orilla, en donde son transportadas en la parte de atrás de una camioneta al Centro de Ciencias de Vida Silvestre en Stacy en donde se convierten en comida de lobos.
El plan para controlar la carpa y restaurar el hábitat de los peces y la vida silvestre en Minnetonka es un proyecto a 10 años, en el cual se incluirá la instalación de barreras y dispositivos de oxigenación. Una mejor oxigenación de los lagos durante los meses de invierno ayudará al crecimiento de la población de un tipo de pez que se alimentan de los huevos de carpa.
El proyecto de 567 mil dólares, está financiado por el Consejo Lessard-Sams.
