MINNEAPOLIS, MN
El Tribunal de Apelaciones de Minnesota confirmó ayer la decisión de aumentar a 15 dólares el salario mínimo en Minneapolis, marcando una victoria para la ciudad en el primer gran desafío de la ley laboral.
En un comunicado de prensa, el alcalde de la ciudad Jacob Frey elogió la decisión del tribunal: “ La ordenanza de salario mínimo está aquí para quedarse. Después de más de un año de litigios, miles de trabajadores y familias de Minneapolis pueden descansar un poco más tranquilos sabiendo que la ordenanza que protege el sustento familiar se encuentran en un terreno legal firme.”
Un juez del Condado de Hennepin aprobó la ordenanza a favor de la ciudad en 2017, a partir de la cual las empresas comenzarían a implementar la nueva política en fases. El 1ro. de enero de este año, el salario mínimo aumentó a 9.86.
En aquel entonces, Graco Inc, presentó una demanda, alegando que la ley de la ciudad se estaba anticipando a la ley de salario mínimo del estado y le pidió a un juez que impidiera que la ordenanza entrara en vigencia. La Cámara de Comercio del estado también formaba parte de la demanda, pero se retiró.
Ayer, la jueza del Tribunal de Apelaciones, Renee Worke confirmó la decisión, afirmando que la ley de la ciudad es válida.
Graco, emitió un comunicado sobre la decisión diciendo que estaban “decepcionados” con el fallo.
“Nos mantenemos firmes en nuestra creencia de que los mandatos sobre salarios mínimos y beneficios de ciudades individuales crean un panorama dañino para nuestra empresa y para nuestros empleados. No nos oponemos a un salario mínimo de 15 por hora, pero las necesidades de los empelados varían y las dinámicas del negocio son diferentes. Tanto los empleados como empleadores necesitan la flexibilidad para definir sus programas de compensación y beneficios de acuerdo a situaciones especificas y permitir que las empresas sean competitivas en sus respectivos mercados.”
En 2017, Minneapolis se convirtió en la primera ciudad del medio oeste en adoptar el salario mínimo a 15 dólares, el cual será gradual en los próximos años. Otras ciudades del país que han adoptado la medida son Seattle, San Francisco y Washington, D.C., mientras que los lideres de Saint Paul votaron el año pasado para aprobarla.
