MINNEAPOLIS, MN. Por Mike Moen
Se está preparando una propuesta en Minnesota que, según sus partidarios, pondría fin al trabajo forzado en los centros penitenciarios.
Señalan que la Decimotercera Enmienda se adoptó hace casi 160 años, pero creen que una forma de esclavitud aún persiste en las cárceles estadounidenses. Grupos de defensa señalan la redacción de la Constitución de Minnesota que establece que no debe existir esclavitud en el estado, con excepciones para el castigo de un delito. Afirman que las personas encarceladas son explotadas al tener que trabajar por 50 centavos la hora, lo que les proporciona poco dinero para indemnizar a las víctimas, mantener a sus familias o tener recursos para reconstruir sus vidas después de su liberación.
Aaron Ernst, quien cumplió condena en Minnesota, dijo que esto eclipsa otras reformas.
“La rehabilitación está ahí”, dijo, “pero la reconexión con la comunidad es simplemente inexistente”.
Mientras estuvo encarcelado, Ernst dijo que lo subcontrataron para realizar trabajos municipales, pero que le habría resultado difícil conseguir ese mismo trabajo después de su liberación. Coalición para acabar con la esclavitud en Minnesota Está trabajando con legisladores en un proyecto de ley para la sesión del próximo año que clasificará a estas personas como trabajadores legales con derechos específicos. Existen iniciativas similares en otros lugares, pero los defensores afirman que las reformas de Colorado no han erradicado esta práctica allí.
Al no proporcionar un salario mínimo, dijo David Boehnke, el principal organizador de la coalición, estiman que la actual estructura salarial en las prisiones roba 100 millones de dólares cada año a los habitantes más pobres de Minnesota.
“Si queremos un sistema de seguridad y no uno de esclavitud, así es como lo conseguimos: damos a la gente derechos básicos y salarios mínimos”, dijo. “Eso beneficia a toda su comunidad y permite que la gente repare el daño que ha causado de forma significativa”.
Los grupos que presionan por el cambio añaden que los efectos de larga data de la esclavitud todavía se encuentran en las cifras de encarcelamientos. Casi el 40% de las personas detenidas en las cárceles de Minnesota son negras – a pesar de representar menos del 8% de la población total del estado.
En un comunicado, el Departamento de Correccionales afirmó su compromiso de brindar experiencias laborales a las personas encarceladas que mejoren sus habilidades fundamentales y les permitan acceder a oportunidades de capacitación técnica. Añadió que esto puede contribuir a una reinserción laboral exitosa.
